Si te preguntas cómo se puede conseguir que los adolescentes pongan un mayor interés al estudio de las matemáticas, uno de los históricos caballos de batalla en el colegio e instituto, este texto te aporta algunas soluciones.
A continuación, profundizamos en unas conclusiones coincidentes con las que aporta a este debate la Science Leadership Academy (SLA), que es una escuela pública con sede en Filadelfia (Estados Unidos). Presta atención.
Los proyectos como base para aprender matemáticas
Las complicaciones de numerosos alumnos para trasladar a los problemas del mundo real las operaciones de las matemáticas más complejas están detrás de los tan habituales fracasos cosechados en esta asignatura. Sin embargo, en ningún caso hemos de caer en la resignación.
Conviene, por tanto, explorar nuevas vías que hayan resultado alternativas válidas a los modelos de estudio que no fueron competitivos. En este sentido, los postulados de la SLA se caracterizan por la aplicación de datos reales en todas las disciplinas del currículo. Las matemáticas también se benefician de la orientación a los resultados prácticos de los casos que se utilizan para el estudio.
Las claves del aprendizaje fundamentado en los proyectos, por otro lado, tuvieron un gran protagonismo en EduCon 2020, la conferencia de profesores de matemáticas que organiza SLA todos los años. Por ejemplo, Jonathan Estey, quien da clases en la citada escuela, puso énfasis en señalar que los alumnos suelen echar en falta autenticidad cuando aprenden matemáticas.
Este sistema de enseñanza requiere pasar de la teoría a la práctica. Por nuestra parte, lo consideramos perfectamente compatible con la utilización de las manualidades en el aprendizaje de las matemáticas. Lo hacen más divertido y accesible, lo que fomenta un mayor interés.
Ten en cuenta que las manualidades son muy visuales, lo que contribuye a la memorización de los conceptos y al incremento de la concentración. Eso sí, recuerda adaptarlas a la edad y las condiciones de cada estudiante.
En las siguientes líneas te aportamos diversos usos de las manualidades para enseñar matemáticas que consideramos que pueden tener éxito. Toma nota de ellos.
1. Los palitos para sumar
En primer lugar, seguro que recuerdas aquellos palitos de los polos. Los mismos que los doctores nos metían en la boca cuando querían comprobar el estado de nuestra lengua. Si les pones numeritos en sus extremos y vas combinando sus colocaciones juntos, puedes propiciar la realización de multitud de operaciones matemáticas. También es posible escribir signos de operaciones en el centro de la barra.
2. El puercoespín
Moldea con plastilina o arcilla la cabeza de un puercoespín. Después, clávale palitos como los de la anterior sugerencia. Te va a servir para, en función de las combinaciones que hagas, sacar resultados de operaciones globales.
3. Sumar y restar mediante huevos de plástico
Como se dividen en dos partes, puedes inscribirles números y juntarlos en diversas combinaciones.
4. Aprende sobre geometría con papel
Puedes comprar recortables que valen para llevar a cabo distintas figuras geométricas. Con ellos es viable, incluso, construir maquetas de edificaciones.
5. Platos y botones
Divide platos en compartimentos y ponles pegatinas de signos matemáticos. Reparte botones en ellos .
En definitiva, las matemáticas, con manualidades, se asimilan mejor.